Luna de Ágata Verde y Blanca: Esta pieza única en forma de luna creciente combina la energía de dos tonalidades de Ágata Dendrítica Verde creando una fusión visual y energética equilibrada. Su diseño destaca por la clara separación entre la Ágata Verde y la Ágata Blanca, generando un contraste armonioso y natural.
La sección de Ágata Verde despliega una gama de tonos que van desde un verde claro y refrescante hasta un verde musgo profundo, evocando la serenidad de la naturaleza. Su textura es lisa y pulida, con una translucidez característica de este mineral.
En contraste, la sección de Ágata Blanca presenta una tonalidad pura y luminosa, ofreciendo una sensación de claridad y paz. Su combinación con el verde crea un balance perfecto entre estabilidad y pureza.
**Los minerales, al ser productos naturales, pueden tener imperfecciones y diferencias en color, forma y textura.
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